Sacudiendo al mundo.

"Mis preciados amigos. Es tiempo de comenzar una batalla sin tregua. Es tiempo de enseñar al mundo que todo lo bien hecho es eterno y lo inútil jamás es para siempre. Es tiempo de obviar batallas sangrientas y comenzar luchas imborrables. Es tiempo de pelear por lo verdadero, pués durará para siempre. Es tiempo de escribir historia, es tiempo de hacer historia. Por ello estamos aquí, mis hermanos mutantes. Para que nuestra labor, para que nuestra misión, quede para siempre."

 

Manifiesto mutante de enero del presente.

 - Entonces, compañeros mios, visto está que empezamos a batallar por este lugar.

 - Sí mutante. Y lo hacemos por nosotros, por ellos, por cada mutante perdido, por cada mutante incomprendido, por cada persona sea cual sea su condición, mutante, humano, mutantes humanos o humanos mutantes. Para acallar si posible es, este silencio, para que nuestra voz se alce.

El mutante murmurando - Ahora lo entiendo, una mutación convertida en un don, en nuestro poder, en nuestra fuerza. Un objetivo, un destino, una meta, un lugar, todo, todo es posible a través de este poder.

- No olvides mutante, que habrá quien nos apoye, que habrá a quien no importemos, pero hemos de estar unidos. La batalla se acerca.

- Gracias amigo mio, cuánto estoy aprendiendo de vosotros. Ahora, he de volver a casa. Está oscureciendo y estoy agotado. Hablemos mañana. 

El camino de vuelta a casa se hace corto, mientras el chico recuerda con emoción cada segundo de su día entre amigos, entre compañeros, entre hermanos, cada conversación, y la gran batalla que comenzaban a preparar. Un sentimiento extraño recorre sus entrañas, siente frío, su respiración se acelera y puede escuchar el latido de su corazón.
Una voz tenebrosa retumba entre las paredes de un callejón

- Sabía que te encontraría, ¿sorprendido?. No, no me temas, témele a ellos, porque para aquellos no eres nada, para mí lo eres todo.